Un día te das cuenta que dentro de ti no tienes nada propio. Te han ido llenando, desde niño, de normas y principios que te convierten en una máquina programada al servicio del sistema.
Un sistema que nos esclaviza y aunque intenta engañarnos haciéndonos creer que como compensación nos protege y alimenta, lo que realmente hace es mantenernos vivos para utilizarnos en su provecho.
Un sistema que nos esclaviza y aunque intenta engañarnos haciéndonos creer que como compensación nos protege y alimenta, lo que realmente hace es mantenernos vivos para utilizarnos en su provecho.
El "yo", el egoísmo y el instinto de supervivencia, con el que nacemos todos los seres vivos, son la raíces que nos fijan a la vida y también el engaño que todos seguimos ciegamente. Sin ellos ningún ser vivo ni ninguna especie podría sobrevivir.
Estamos diseñados de tal forma que cada uno de nosotros ve el mundo como si ocupara el centro del universo.
Estamos diseñados de tal forma que cada uno de nosotros ve el mundo como si ocupara el centro del universo.